Merval: Continua la lateralizacion con bajo volumen
Por Leonardo Guidi de Grupo Carey SA
Es increíble pensar que un mercado de frontera, como el nuestro, esté afrontando este momento actual de incertidumbre y pesimismo de una manera menos volátil que la que vemos en mercados más desarrollados como Wall Street, pero como la evidencia está demostrando que efectivamente es así, tenemos razones para confiar en que los fundamentos de nuestras empresas son sólidos y en que la mayoría de los inversores continúan manteniendo vigentes sus expectativas alcistas en relación al comportamiento de nuestro mercado para lo que resta del año.
Lo que vimos en el Merval durante esta semana fue una recuperación de la mano de Wall Street que también comenzó a recuperarse y a dejar atrás la volatilidad pero, como era esperable, rebotó a la baja en la línea de tendencia alcista que estuvo vigente hasta hace dos semanas y que, de ser un piso fuerte ahora pasó a ser un techo fuerte y difícil de superar así que la conclusión inmediata que puedo sacar de esto es que, hasta que no veamos al S&P500 posicionarse por encima de la media móvil de 200 ruedas será poco probable que veamos al Merval romper el techo que tiene en la zona de los 33.000 puntos ya que, como vemos en el gráfico, nuestro índice continúa moviéndose de manera lateral en el rango comprendido entre los 31.000 y los 33.000 puntos.
Durante esta semana hemos visto de qué manera, poco a poco, algunas acciones comenzaron a “despertarse” pero aun así, es evidente que hasta que no se despierten las acciones del sector bancario y energético, nuestro índice puede continuar moviéndose en dicho rango durante mucho tiempo más ya que son estas las acciones que han venido liderando la suba que nos trajo hasta acá y en un mercado tan chico como el nuestro tenemos muy pocas posibilidades recambio, con lo cual, son pocas acciones que podrían asumir el liderazgo y conducir una nueva suba del Merval hacia los récords.
En resumen, mientras esperamos a que Wall Street recupere la senda alcista hacia los récords, nuestra estrategia debería ser de espera, en el caso de que seamos inversores muy aversos al riesgo que no se animan a comprar en un momento como este y la de compra para aquellos inversores que ven a esto como una simple corrección bajista y por lo tanto como a una oportunidad de compra de cara a la recuperación.
En mi caso, por ejemplo, hay acciones como MIRG, IRSA, GGAL, SUPV, CEPU, PAMP, TECO2, TRAN y HARG que me gustan mucho y que considero que están a buenos precios para comprar debido a que mi análisis de la situación actual es que, en este momento, nos encontramos transitando una corrección bajista dentro de un mercado alcista y no en el inicio de un mercado bajista por lo que, cuando Wall Street comience a dar señales de recuperación (por ejemplo posicionándose por encima de la media móvil de 200 ruedas) estarán dadas las condiciones para que compremos las acciones antes mencionadas a buenos precios y así saquemos el mayor provecho posible del reinicio de la tendencia alcista de los mercados.
Wall Street: Se alivian las tensiones y comienzan a llegar los balances
Ver un mercado tan volátil en Wall Street es claramente algo inusual, pero si tenemos en cuenta que 2017 fue el año menos volátil del mercado estadounidense desde principios de los años 60s, tenemos que concluir que eso también era inusual y que por lo tanto, no podía prolongarse indefinidamente.
La razón por la cual, durante el año pasado nos leímos o escuchamos nada acerca del inusual comportamiento de los mercados fue obviamente que un mercado alcista con baja volatilidad es el mejor de los mundos posibles para la mayoría de los inversores y por esa razón todos estaban exultantes de alegría mientras que, un mercado oscilante con alta volatilidad es uno que pone nerviosos a la mayoría de los inversores y provoca la circulación de información de todo tipo que, más que aclarar, confunde y motiva a muchos a salirse del mercado a causa de su aversión al riesgo, lo cual, por supuesto, empeora la situación a causa de la famosa profecía auto-cumplida (o sea, los inversores venden porque creen que el mercado va a bajar y con sus ventas producen efectivamente la baja del mercado que inicia un efecto manada difícil de controlar emocionalmente).
Aclaremos algo antes de continuar: La volatilidad tiene dos características que le son propias y que han sido validadas por la evidencia empírica:
- Siempre revierte a su media móvil, gracias a lo cual sabemos que una volatilidad muy baja o muy alta nunca se prolonga durante mucho tiempo.
- Se auto-correlaciona consigo misma de tal manera que siempre veremos días volátiles seguidos de días volátiles y días de baja volatilidad seguidos de días de baja volatilidad. Dicho de otro modo, la alta o baja volatilidad siempre se presenta “toda junta” y no de manera alternada, lo cual se conoce como “heterocedasticidad”.
Sabiendo esto, ya no nos parecen tan raros los últimos dos meses del mercado en los cuales reinó la alta volatilidad y la incertidumbre ya que eso es lo que debemos esperar cuando los días de baja volatilidad terminan. Sé que fue doloroso haber tenido que aguantar semejante baja estando adentro y que nos perturba emocionalmente estar comprados en un momento tan volátil como este pero es así como funcionan los mercados y es por esta razón que voy a intentar traer la mayor cantidad de certidumbre que pueda a través de este informe para así ayudar a calmar los ánimos ya que mucho se habla del inicio de un mercado bajista y cuando leo algo así yo me pregunto: ¿Basado en qué fundamentos económicos lo dicen?
Vamos a los datos concretos:
Los rendimientos de los bonos del tesoro a 10 años y a 3 meses nos dicen que hay un 1% de spread entre ellos y que por lo tanto, los inversores no están esperando una recesión económica para dentro de un año y por esta razón es que, a las causas para que veamos un mercado bajista deberíamos buscarlas en otro lado y no en la macroeconomía de EEUU.
Mirando el gráfico del S&P500, nos queda claro que el índice se está moviendo en el rango comprendido entre los 2.580 puntos y los 2.670 puntos, en donde también se encuentra la media móvil de 200 ruedas, el techo técnico más fuerte que debe enfrentar y por lo tanto, nos resulta obvio pensar que, para que el S&P pueda salir de ahí de manera alcista se necesita algún catalizador que renueve las expectativas alcistas de los inversores y que devuelva el optimismo al “Sr Mercado”.
Las dos causas que tienen más probabilidades de lograr eso son:
- Una resolución satisfactoria de la guerra comercial de EEUU con China.
- La publicación de buenos resultados en los balances por parte de las empresas cotizantes
Podría agregar una tercera causa referida al alivio de las tensiones bélicas en Siria pero me parece que las dos anteriores son las que tienen un mayor peso en este momento así que, al menos en mi caso, mis ojos estarán puestos en el calendario de publicaciones de balances y en los vaivenes de las relaciones entre Washington y Beijing.
Para ver más análisis detallados de acciones e índices haga click acá